Muchas veces son nuestros propios pensamientos los que bloquean nuestro cuerpo. Las articulaciones se vuelven menos flexibles y más dolorosas, los músculos se resienten, aumenta la pereza, la falta de bienestar y vivimos con menos vitalidad. ¿No es así como nos sentimos a menudo en el día a día?
Los potenciales innatos que tenemos se alteran y poco a poco nuestra actividad mental, corporal y de estado de ánimos disminuye hasta tal punto de no reconocernos a nosotros mismos.
6 semanas son suficientes para liberar tu creatividad y recuperar tu vitalidad aumentando la alegría en tu día a día.